Mark Hentze preparado para la expedición sin retorno del primer descenso del Río Santo Domingo.
El día martes 6 de marzo de 2012 Mark Hentze y yo Eneko Yarza comenzamos la expedición en el puente de Pailania en el pueblo de San Francisco en el oriente de Antioquia en Colombia. El río se veía bonito y tranquilo.
Mark y yo nos conocimos hace 2 meses en Putumayo donde kayakeamos juntos el río Mocoa. En esta ocasión nos juntamos en Medellín y organizamos lo que iba a ser mi quinto primer descenso en Colombia, la expedición que él quería hacer desde hace tiempo: entrar en Pailania-San Francisco y correr los ríos Santo Domingo, Verde y Samaná norte hasta el puente de la autopista. 35 km con un desnivel aproximado de unos 500m, de ellos 300m de desnivel en un cañón que se encontraba del km 4 al km 8 del recorrido. Calculamos que tardaríamos 2 o 3 días en completarlo, asi es que ibamos con comida y a dormir en el río.
Ésta zona es uno de los lugares donde mayor cantidad de minas antipersonales hay, y hasta hace bien poquito zona de mucho conflicto con campamentos de diferentes guerrillas.
Los amigos Nicolás Mejía y Nicolás Yacaman de Medellín venían como equipo de apoyo. Nos trajeron en su auto, nos filmaron unas entrevistas, nos dejaron unas cámaras para documentar bien toda la expedición y estarían atentos a cualquier aviso desde el celular de Mark. Muy buena onda estos parceros o colegas.
Ésta de abajo es la última foto que quedaría en tierra, todo lo siguiente se lo llevaría el río, todo excepto un cuerpo con su pijama y su reloj.
Al principio era agua tranquila y luego comenzó a tener desnivel. Corrí un rápido bonito clase 5 y al rato nos salímos en la orilla izquierda para mirar lo que venía entre esos bloques grandes. Unos pasos más adelante el río caía 8-10 metros desapareciendo por unos metros debajo de bloques grandes. Nos llevó tiempo portear por esas rocas con los kayaks llenos de cosas. 30m río abajo dejamos los kayaks y Mark me dijo: "Quiero parar aquí, no se que me pasa, estoy cansado". Miramos lo que venía después, rápidos muy fuertes con mucho desnivel mínimo 1km, mañana tocaría portear largo por la vegetación de la pared casi vertical en altura.
Mientras cocinábamos pasta cayeron dos gotas de lluvia por lo que yo busqué una roca plana donde poder poner la tarpa como techo. Estaba a unos 5 metros del nivel del agua, entrabamos los dos pero era más pequeña que la roca que se le antojó a Mark que estaba a unos 6 m de altura.
Mark volvía a repetir: "Que lugar tan bonito".
Mark mandó un mensaje por celular a Nico Mejía a la 21´40: "Todo bien, muchos saltos. Bonito".
Se veían rayos pero no llovía donde estábamos, asi es que Mark me dijo que se iba a su roca grande a dormir, 10m río abajo, y yo le invité a venir a la mía que tenía techo si llovía. "Bien, buenas noches."
Aunque yo no supe, Nico contestó un mensaje a Mark a la 21´55: "Ok, llueve x Guatape".
Sentado en mi roca con la luz de la luna casi llena miraba río arriba los bloques gigantes, hice una última filmación de buenas noches a las 22´05 y a dormir, con la cremallera del saco abierto hasta la cadera.
22´30, segundo 0 :De los sueños me saca un estruendo repentino. Abro los ojos de golpe, levanto la cabeza y veo una pared blanca en frente donde antes era seco. Me levanto de golpe, mientras me salgo del saco echo 2 gritos a Mark, lluvia horizontal, me agacho para bajar de la roca y una ola que sobrepasa mi roca me tira.
segundo 5 del despertar: La ola me tira 2m de rodilla a una roca y otros 2m a la poza que antes era seca. Me encuentro dando vueltas bajo el agua, entre piedritas y arena, y dos pensamientos pasan por mi mente mientras lucho para arriba: No tengo chaleco! Esto será el fin? Saco la cabeza del agua y me encuentro a metro y medio de la orilla-pared izquierda subiendo rápido río arriba por la contracorriente que se estaba formando, hacia el chorro de mi roca-cama, no quiero! y entre yo y la pared mi saco de dormir flotando. Si pensar pongo el brazo encima del saco y me impulso a la pared y la agarro. Ya el agua me había subido los 4m de caída.
segundo 10 del despertar: Agarro la pared y comienzo a escalar para arriba con las piernas en el agua, con la luz de la luna. Calculo que el agua estaba subiendo un metro por segundo y escalé 10m con los pies en el agua. Me adelanto al agua y llego a un techo sin salida para arriba, veo una liana o rama lejos a la izquierda, "No aguantará!" microdudo, el agua subiendo y al instante "Vida o Muerte!" me digo y me lanzo. No se rompió y como gato escapando del agua seguí escalando y me resguardé en la vegetación vertical.
segundo 30 del despertar: Estoy vivo! Estoy VIVOOOO! Descalzo y en pijama mojada, las piernas temblando. Intento respirar hondo, 2 minutos, 15 metros más alto de donde dormía, más estruendo, qué! que el río da otro golpe de subida y el tronco del gran árbol se queda bajo agua y los salpicones de las olas me mojan. Otro chute de adrenalina y para arriba a cuatro patas en la vegetación de la pared. Hay un metro casi plano, aquí me quedo.
Luna de la siguiente noche sobre las montañas de Antioquia. |
Con la luna se veía la bestia blanca, todos los bloques gigantes bajo agua, y explosiones de agua que iban más alto que donde yo estaba. Mark! Mark! grito, pero casi no me oigo ni yo. La tierra y los árboles temblaban. Calculo que el caudal del río pasó de 15 a 300 m3/seg o cumecs en un instante.
Yo no podría contarlo si alguna de estas cosas no estuviera así: saco de dormir abierto, saco de dormir flotando entre yo y la pared, rápida reacción, habilidad en agua y roca, esa liana o rama, y la luz de la luna casi llena, y quizá algo más.
A las 2 de la noche comenzó a llover por 3 horas. Estaba muy mojado y tenía frío, pero esos eran pequeñezes, acurrucado me abrazaba, sólo tenía que pasar la noche y mañana buscar la carretera. Mark! Mark! no puedo hacer nada.
A las 6 de la mañana cuando aclareaba bajé de la pared al campamento. El agua ya bajo y sólo era 2 metros más alto que ayer a la tarde. Fuí a la roca de Mark, no hay rastro de nada, Mark! Mark! Encuentro mi cubrebañeras atorado y roto. Meto la cabeza en el agujero desde la roca de Mark a la cueva, no hay señal y dejo el cubre atorado al tronco, el recordatorio... Encuentro un strap a 10 m de altura. 7 de la mañana, no hay señales de Mark, me voy.
Caminé casi 3 horas descalzo siguiendo río arriba. Me encuentro un buscador de oro y me dice que el río está muy alto esta mañana, que así está en época de lluvias. Y eso que ya era 10 veces más pequeño que anoche! Me dió agua de panela para beber y me mostró el camino, gracias. Llegué a la carretera y a Pailania. Llamé a los Nico y comenzaron a mover todas las fichas (embajada estadounidense, policía, bomberos, etc.). Abel, el cura-presidente de Pailania, me dejó ropa, me dieron desayuno, y comenzamos a organizar la busqueda.
Día y medio después de la borrasca, así es cómo en Colombia le llaman a las crecidas de los ríos, apareció el cuerpo ahogado de Mark Hentze de Oregon-USA 20km río abajo en la confluencia del río Verde con el río Caldera, el comienzo del Río Samaná norte. Mark venía a Colombia todos los años desde el 2005 y ya había conseguido la visa de residencia. Él era uno de los mayores conocedores de los ríos de Colombia y el autor del libro Colombia Whitewater, la única guía de ríos para la práctica de kayak o rafting en Colombia, lo cual yo mismo lo tenía. Mark Hentze, callado y tranquilo, nunca tenía ningún conflicto con nadie, era una buena persona, y después de dejarnos un buen legado se nos ha despedido en un lugar casi elegido, en su amada Colombia, en un río que el eligió, en un cañón que le parecía fascinante y en una roca alta y plana que él eligió.
Sigue tranquilo tu viaje Mark, y gracias.
Ese tren blanco nos iba a llevar a los dos, pero me tocó comodín y otra vez escapé. De las 7 vidas del gato otra gasté, y como me dicen unos amigos me río llorando ya que somos hormigas en un mundo de gigantes.
Gracias a la vida que me ha dado tanto...
Link del siguiente artículo: Adiós en el Cañón de Mark
Video de TV noticias:
Oso ondo idatzia... Istoria idazten eneko, hau da kolonbiako ibaien istoria eta zu barne. Segi bixkor eneko laister arte!!
ReplyDeleteAupa Eneko...soy pablete,siento que este viaje que tanto hemos disfrutado termine de esta manera,mucho animo para ti y para la familia de Mark,para el que descanse en paz donde quiera que este,gran persona la que nos deja esta vez...
ReplyDeleteUn abrazo grande y aqui estoy pa lo que haga falta.
Hola Eneko, todovia recuerdo aquel instante en que te conoci en California, en un paradero con tu mochila y la aparencia de aventurero, del tiempo que pasamos charlando nose de que en el camion de 18 morenas, y un adios encaminado al el parque Yosemite. Ya ha pasado mucha agua bajo el puente y mas de 30 paises y aun conservo las imagenes y los recuerdos de tu buen corazon. Se que eres un hombre con suerte y yo tambien por conocerte. Un abrazo amigo y aqui en San Cristobal de las Casas, Chiapas ya sabes que tienes tu casa si alguna vez por un instante se te agota la adrenalina, Animo!
ReplyDeleteMartin Lizama
Descanse en paz. Me alegro de que puedas contarlo y ¡Feliz cumpleaños Eneko!
ReplyDeleteAupa Eneko. Ya sabes y no creo que haga falta que te lo diga, que me tienes aqui para lo que necesites. Un abrazo.
ReplyDeleteMarc Grau
Thank you for telling us this story. We will miss Mark here in Oregon. He was a good man.
ReplyDeleteHunkigarria....muxu bat polita!
ReplyDeleteTEMPUS FUGIT....Ainara
Aupa Eneko, Animo!
ReplyDeleteBizitzaren ikuspegi zoragarria!
ReplyDeleteBesarkada bat,
aurrera Eneko!
Jainkoari eskerrak bizirik zauden...es tan estremecedor...!Todavía tengo los pelos de punta y me desbordo cual río...Izugarri ondo idatzi duzu txikito,ongi etorria etxera!
ReplyDeletenadie dijo ke fuera facil esta aventura de vivir animo y ke esto no te pare en tu gran esperiencia en la vida muxu aundibat !!!
ReplyDeleteSin palabras, saludos Eneko desde Aventurec! un fuerte abrazo...
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